Monday, August 21, 2006

Otro Sábado de Bicimontaña





Este sábado mi esposita no nos pudo acompañar a nuestra pedaleada matutina, el motivo la extracción de una muela cordal que la tuvo incapacitada por 2 días, no obstante al igual que otros 36 ciclistas me interne en la montaña a descubrir otros senderos desconocidos por un servidor, dentro de este grupo se sumaron aquellos que por vacaciones o trabajo estuvieron fuera del país y tenían varios días de no salir con el grupo, en fin fue bueno compartir nuevamente con ellos, aunque ha decir verdad creo que ellos resintieron su falta de practica a lo largo del recorrido.

Nuestro destino nos llevo este fin de semana a “los pinitos” para lo que inicialmente tuvimos que alcanzar “Las cruces” y luego “ El Mirador” de este último punto el grupo se dividió en dos, los que necesitaban regresar y los que teníamos ganas y tiempo de seguir, así entonces partimos rumbo a los pinitos un pequeño grupo de 8; el poco tiempo de practicar la bicimontaña me hace desear conocer rutas nuevas y que no he tenido oportunidad de recorrer, así fue como luego de descender un poco, llega la triste realidad subir todo lo que haz bajado y si es posible un poco mas, cansado si pero no agotado, luego de pasar por una vereda entre cafetales con precipicio a un lado llegamos a los pinitos no sin antes haber hecho un pequeño alto en unos naranjales y comernos unos de sus frutos.

De ahí para fue buscar el retorno a travesando una vereda si es que puede llamársele así, dado que su inclinación era tal que montarse en la bici era casi estar decidido a terminar golpeado en el suelo, Imagínense que aún así me deslice y caí sentado con la bicicleta casi encima mió, finalmente logramos bajar y luego a subir otro tramo mas, para encontrarnos que el camino esta cerrado con un portón metálico el cual no hay modo de bordear y la única forma es pasar sobre el; en fin salimos de ahí y al llegar nuevamente al mirador ya es cosa solo de bajar, wooooow lo que mas nos gusta, al final fueron 18km. tiempo efectivo de pedaleo 2 horas

Así entonces inicio la semana de trabajo, cambiando el disco duro del bicimontañista por el de empleado de oficina, cambiando el casco por la corbata, la lycra por el pantalón de vestir, los zapatos embarrados por unos pulcramente lustrados, la bicicleta por el carro; la cómoda y fresca camisa por una manga larga de vestir abotonada hasta arriba y el camino de tierra con rumbo hacia cualquier vereda o camino por explorar por las calles que de nuestras casas nos conducen a la oficina y la rutina de las labores profesionales. Así inicia una semana mas con las pilas recargadas gracias a lo que por hoy nos brinda la bicimontaña.


Monday, August 14, 2006

Los fines de semanas tan esperados





 


Con el acostumbrado entusiasmo de los fines de semana, el pasado sábado nos dispusimos a primera hora del día salir a pedalear y relajarnos un poco, olvidándonos de una semana pesada de trabajo y de miles otras cosas mas que nos agobian.

El despertador suena a las 5:00am y pese a que es 30 minutos más temprano que la hora a la que nos ponemos en pie los días de semana, en que tenemos que trabajar, cuando es sábado el ánimo es mucho mayor; nos disponemos a vestirnos, subir las bicis al carro y salimos disparados al punto de reunión, en el mismo ya hay otro grupo de entusiastas bici montañistas ya preparados para dar inicio a su recorrido. Poco a poco nuestros amigos se van haciendo presentes y en cuanto menos lo pensamos estamos ya ascendiendo la cuesta de los buenos días, guau que manera de dar los buenos días un kilómetro de pendiente ascendente y estás preparado, el motor corporal a calentado lo suficiente y el que aún se encontraba medio dormido ha despertado por completo.

Este día hemos hecho un grupo de 20 personas aproximadamente, la verdad olvide contarlos, menos mal nadie se nos perdió en la montaña, quien hasta hace unos meses atrás era el guía y líder del grupo por sus problemas de salud ha tenido que dejar de practicar este deporte y desde entonces no se ha suplido su ausencia, hay intentos de uno u otro amigo de tomar la batuta pero no es fácil, entre todos nos ponemos de acuerdo el camino a seguir y damos inicio al recorrido, haciendo mas paradas de las habituales por decidir el mejor sendero y dando un poco mas tiempo a los mas novatos que dadas sus condiciones van un poco mas lento que el resto del grupo nos quedamos por ahí riéndonos de todo y de nada lo cual hace aún mas ameno nuestro pasatiempo.

Las veredas entre cafetales, como las que muestro en la foto son prueba de ello, estuve a punto de caer por parar a tomar esta foto pero tenia que aprovechar el momento para tener un recuerdo y algo que mostrar junto con el relato de esta salida. Escogimos una ruta con muchas bajadas ( jajajaja, como sabrán para no preocupar a los novatos hay que decir una que otra mentira piadosa) y este sábado pude constatar que llegue con muchas fuerzas porque no camine ninguna de las pendientes y eso que en dos de ellas, la mayoría se bajo y empujo su bicicleta, en fin a veces tu cuerpo responde bien otras no tanto, al final hemos hecho 17 kilómetros, con un tiempo efectivo de pedaleo de 1 hora 30 minutos, lo cual si bien es cierto no fue mucho, si ha sido lo suficiente para olvidarnos de todo y despejar nuestra mente, dejándonos un sabor dulce y el deseo de que los próximos días pasen volando para que nuevamente sea sábado y estemos dando los buenos días con la lengua de fuera por el cansancio pero felices de poder estar sentados sobre nuestras bicicletas.



 

Monday, August 07, 2006

Después de 365 días




Hace un año en las vacaciones de agosto recién había comprado mi bicicleta de montaña, sin tener mayor conocimiento de lo que quería, lo que sabía era que necesitaba ejercitarme un poco (la verdad es que necesitaba y necesito mucho pero mucho ejercicio para poder deshacerme de esas libras demás que aún conservo) fue así como caí en la idea, de que la bicicleta me ayudaría a lograr mi meta.

¿Porqué bicicleta de montaña y no de ruta?, pues la verdad, me parecían mas atractivas visualmente, no pensaba en el uso que les daría, es mas jamás se me cruzo por la mente que me iría a la montaña en bicicleta ni nada por el estilo; mi idea siempre fue salir cerca de mi casa en la calle y con eso me daba por satisfecho, menos mal me decidí por una bicicleta de aluminio y no por una de hierro y eso que el precio pues ya ven es sumamente relevante.

En fin en esas vacaciones de agosto, visitamos un lugar en Apaneca, junto a nuestros amigos Los Reinoso, llevamos nuestras bicicletas ya que Marco Reinoso, también había comprado una bici de montaña y el lugar pues obviamente se presta para la practica de este deporte, total ya en el lugar hice mi primer recorrido en la montaña no tenia mayor experiencia con los cambios, no obstante nos aventuramos el recorrido fue muy corto pero, fue lo suficiente como para entusiasmarme a repetirlo, recuerdo que al siguiente día salimos por otro lado y tuve mi primera caída, en una pequeña bajada me metí en una zanja y mi inexperiencia unida al nerviosismo hicieron que sujetara mas de la cuenta el freno y pum, pum, pum al suelo no me raspe pero me hice un pequeño moretón en la pierna y bueno ese fue mi primer terreno comprado.

Ahora un año después de ese recorrido he adquirido un poco mas de experiencia y a su vez he superado los temores y tengo mas confianza, he llegado a conocer mi bicicleta, Marco lastimosamente tuvo que dejar la bicicleta por problemas de salud, pero en sustitución a dejado a su hijo Marco Javier, quien cada día mejora en la pedaleada y dentro de poco llevara a su primo a iniciarse a estos menesteres.

Otros amigos como Hugo y Javier Calderón (padre e hijo) con esto del mundial de football se han alejado un poco, pero espero que ya pronto regresen y sigan practicando con nosotros, las primeras salidas las hicimos juntos, recuerdo esas bajadas a San Blas desde Zaragoza en compañía de otros diestros del pedal como el Chato y su hijo Teo, que nos han llevado a conocer otras rutas y los que poco a poco nos fueron incentivando a seguir practicando este deporte.

Ahora después de esas primeras pedaleadas hace 365 días atrás, mi esposa al igual que yo, disfruta junto conmigo de salir a la montaña, hemos encontrado un grupo de ciclistas con mucha más experiencia y de los que hemos aprendido más y con quienes compartimos nuestro entusiasmo por la bici montaña. Es poco el tiempo pero hemos pasado muchas cosas, como el accidente de Amanda, el retiro de Marco y Don Oscar ambos por salud, varios paseos organizados por Bike Center y muchos otros de los del día sábado, caídas, agotamiento en medio del recorrido, risas, tantas cosas vividas y muchas más las que nos faltan por disfrutar, primero Dios tengamos muchos años mas de vida (como dicen mis hijos en sus oraciones) para seguir disfrutando de esta pasión por la bicimontaña.



 

Friday, August 04, 2006

Metapan - Texistepeque




Fotos Cortesia de Bike Center



Metapan- Masahuatl-Apuzunga

Sin duda alguna uno de los paseos mas intensos de los que hemos sido participes. Al ver las gráficas del recorrido parecía alcanzable fácilmente, no obstante la realidad ha sido otra, sin embargo el calificativo sigue siendo el mismo, "Estupendo"
Quizá el hecho de que todos los participantes (novatos intermedios expertos y bestias ) saliésemos desde un mismo punto hizo ilusionarnos con un recorrido si bien largo (42 Km) pero que nos permitiría apreciar mucho nuestro querido El Salvador, sin embargo luego de los primeros 12 km. en el cual nos esperaba el primer abastecimiento, luego iniciaría un pequeño calvario por supuesto para nosotros los novatos porque nuestras queridas bestias fueron visto al menos por un servidor solo en el punto de partida porque de allí quien sabe que fue de ellos (total son bestias y su cometido es pedalear y pedalear ).
El primer arroyo como de dos metros de caudal me hizo pensar y hoy que hago me subo la bici a la espalda y le pido a Dios que me haga el milagro de caminar sobre las aguas o bien que las separe y me permita caminar sobre tierra firme, mis suplicas no fueron escuchadas dado que la respuesta era fácil, " a esto haz venido amigo así es que adelante" recordé que Amanda venia detrás mío y que debía esperarla para ayudarle primero a ella , pero por suerte otros biker se encontraban totalmente enloquecidos con ese arroyo y según me explicaron debía de pasar montado en la bici y que ellos ya lo habían pasado en seis oportunidades, me ayudaron primero pasando a Amanda para que ella no se mojara y luego adelante mi amigo tome impulso y zas a pasar el río las aguas llegaban a cubrir la mitad de las llantas y la velocidad lograba que las aguas casi casi que se dividieran, nos mojamos mucho pero fue estupendo el agua estaba fría pero a esa hora del día fue fabuloso refrescarse.
El tramo siguiente del río al puente de hamaca fue pesado pero lo alcanzamos sin mas mayor dificultad, llegar al segundo abastecimiento no fue tarea fácil, dado que la pendiente era interminable ratos pedaleando pero mas ratos caminando, finalmente llegamos y pensando que lo peor había terminado procedimos a hidratarnos y comer algo para agarrar fuerza y continuar con el último tramo.
Pero contrario a lo esperado las cosas no estaban mejorando las pendientes siguieron apareciendo acompañadas del cansancio en las piernas y un rogar a Dios que pronto terminara lo pesado finalmente el suplicio termino y fue recompensado con una bajada increíble el camino si bien ha sido encementado el agua que sobre el mismo corre ha debilitado el terreno y las piedras, hoyos y demás abundan así que a fijarse bien, decidí soltar los frenos agarrarme bien y bajar, que sensación mas estupenda el agua salpicando por todos lados logrando que nos mojasemos casi totalmente esquivar piedras, buscar el tramo mas asequible y menos riesgoso fue parte de este descenso que hizo que todo el sufrimiento anterior se borrase por completo de nuestras mentes y pasase a ser solo un recuerdo mas.
Al llegar al pueblo nos encontramos con la noticia que teníamos que subir al camión dado que venia un tramo pesado de mas o menos 2 km en una pendiente ascedente de importancia, así lo hicimos quiza en otra oportunidad la conquistaremos de allí a bajar y pedalear hasta Apuzunga.
Al final este recorrido si bien fue agotador ha logrado despejar nuestras mentes y prepararnos para una semana mas de trabajo en la que muchos compartiremos nuestra experiencia y trataremos de entusiasmar a mas de uno de nuestros amigos para que se anime a vivir estas experiencias.